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2. Trabajo colabora vo
Algunas redes sociales pueden facilitar el trabajo en equipo: Facebook y LinkedIn, por ejemplo, permiten crear grupos (públicos o privados) en los cuales los colaboradores pueden aportar ideas para desarrollar proyectos en un espacio dedicado a la inteligencia colec va.
Lo mejor de esto es que tanto Recursos Humanos cualquier otra área de la empresa puede descargar todos los comentarios ahí ver dos, conservando el capital intelectual ver do en su desarrollo, para poder aplicarlo en otro propósito similar.
3. Grupos con intereses comunes
Hay ac vidades que no forzosamente son produc vas en sí, pero que, al mejorar el clima laboral, ayudan indirectamente al aumento de la produc vidad. Por ejemplo, Recursos Humanos puede hacer publicaciones en la cuenta empresarial de Facebook acerca del próximo torneo de futbol en el que par cipará la compañía con el  n de encontrar algunos interesados en integrar el equipo que la representará, e incluso para la organización espontánea de grupos de animación para apoyarla. Las posibilidades son in nitas, ya que pueden crearse clubes de todo  po:  latelia, círculos de lectura, cine, etcétera.
4. Generación de ideas innovadoras
Cuando se cuenta con una red social interna, pueden lanzarse convocatorias para el desarrollo de proyectos encaminados a la innovación. Por ejemplo, si los lugares de estacionamiento se ven comprome dos debido a una nueva polí ca de parquímetros en las calles aledañas, alguien puede proponer la organización de un rol de “aventones” para compar r el auto con colegas que  enen rutas similares.
5. Facilitan el proceso de reclutamiento y selección
En algunas redes sociales muy populares hay grupos que aglu nan a profesionales conforme a su especialidad. Financieros, mercadólogos, comunicólogos y médicos de dis ntas áreas, entre otros, se encuentran en Facebook o LinkedIn. Incluso a través de Twi er, mediante el uso de e quetas (hashtag) se puede llegar a dis ntas comunidades de profesionales. Todos estos espacios son idóneos para publicar las vacantes que las empresas ofrecen.
Pero no solamente sirven para hacer difusión de la oferta laboral. LinkedIn puede ayudar a descubrir candidatos con alto potencial ya que ahí puede verse su formación académica y trayectoria profesional. Además, se pueden comprobar referencias y hasta tener un panorama preciso de las habilidades y recomendaciones que  enen, no sólo por su número de validaciones, sino también otorgando un mayor valor a éstas dependiendo del nivel jerárquico de quienes las emiten.
Otras redes sociales menos formales pueden dar un buen indicador de la congruencia del per l de los candidatos con la cultura corpora va de la empresa que lo pretende. Por ejemplo, en cada posteo se pueden observar algunos rasgos de carácter, es lo de vida, nivel socioeconómico y hasta nivel cultural, y valorar si entra en el per l que busca la empresa.
6. Reducción del periodo de adaptación
La interacción en el mundo virtual cada vez gana mayores espacios en el mundo real, resultando cada vez más signi ca va y trascendente. En ese marco, las redes sociales bien pueden servir para ir generando lazos de con anza, acortando considerablemente el proceso de integración de los recién contratados con sus respec vos equipos de trabajo. Esta forma de crear relaciones les permite descubrir rápidamente intereses a nes que facilitan la socialización en vivo y, más pronto que tarde, adoptar como propios los obje vos de su equipo de trabajo y, por ende, los de la compañía.•
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